Mi lista de blogs

martes, 7 de junio de 2011

Matrimonio español-turco 1. Cuando las familias se meten (o no)

Otro tema que puede te agobie antes, durante y después de vuestro matrimonio (y relación) con un/a turco/a es la reacción de tu familia o la familia de tu pareja. Ya sabrás que hay tres reacciones posibles:

-Que lo acepten a la primera. Me consta que hay familias que han reaccionado no sólo bien sino apoyando a su hijo/a en su decisión. Si es tu caso, créeme que tienes que sentirte enormemente afortunado/a., es un gran problema que te quitas de encima, además acarrea la satisfacción de sentir que los tuyos están de tu lado, dispuestos a escucharte y a ayudarte si lo necesitas. Para que esto ocurra tienes que tener una familia propia (o política) que te quiera a rabiar, que acepte tus decisiones (que te respete) y que además de lazos familiares haya amistad. Qué maravilla.

-Que decidan ignorar la situación. Este es un caso también poco frecuente. Quizás pienses que no duele tanto como recibir un rechazo, pero créeme si te digo que también duele mucho, muchísimo. Es muy duro querer hablar con tu familia y ver como cambian de tema o simplemente ignoran que hayas hablado. A veces resulta reconfortante ver que se implican en el tema de tus sentimientos o problemas, aunque no siempre estén de acuerdo. Es terrible también recibir sólo indiferencia por parte de tu familia política, es un feo que hace daño. Si eres una persona afable y amable, a la que le gusta comunicarse con los demás, deseosa de dar y recibir cariño esta situación te destrozará el corazón porque chocar contra el hielo siempre hace daño.

-Que haya un rechazo claro ante la relación. Por desgracia esto suele ser bastante frecuente y se pasa verdaderamente mal. Ya es duro que amigos, conocidos o incluso desconocidos critiquen tu relación asi que que esto pase con tu propia familia es muy hiriente. A veces, por suerte, hay familias que cambian con el tiempo y terminan aceptando esta nueva situación. Otros enamorados/as tendrán que sufrir el desprecio para siempre con lo que eso acarrea.

Y, ¿qué hacer en estas dos últimas situaciones?.

Lo más lógico es que intentes hablar con ellos, que no siempre resulta fácil, a veces puede dar miedo hasta sacar el tema, pero tarde o temprano tendrás que enfrentarte a esta situación.
Con la familia política esto se hace mucho más complicado porque, a no ser que hables un turco fluido o habléis otra lengua común, tendréis la gran barrera del idioma que dificultará cualquier acercamiento. Vuestra pareja puede hablar con su propia familia pero a veces esa persona a la que quieres no tiene fuerza suficiente para hacerlo, y entonces la cosa se complica.
En el caso de que te atrevas a hablar pero no cambien de opinión o que sea imposible dialogar con ellos, lo único que puedes hacer es seguir con tu vida, no será tan feliz pero debes seguir adelante, tienes derecho a decidir tu futuro porque para eso eres dueño/a de tu vida, atrévete a buscar tu felicidad si realmente no hace daño a otros, date la oportunidad de ser feliz. Pero, eso sí, asegúrate de que estás muy unido/a a tu pareja y él/ella a tí porque si te alejas de los tuyos puede que te arriesgues a quedarte algún día solo/a. De hecho si para tí la familia es lo más, quizás deberías plantearte dejar la relación porque lo pasarás realmente mal luchando.
Pero recuerda, ten paciencia, y dales tiempo porque a veces la personas y las stuaciones cambian.
¡¡Mucho ánimo!!.

No hay comentarios: